Para él, las competencias de la enfermera Familiar y Comunitaria está capacitada como profesional sanitario mejor posicionado para el abordaje preventivo de estos eventos. “La educación para la salud es una de las herramientas más útiles para capacitar en el empoderamiento de los autocuidados con uno de los fines básicos, mejorar la calidad de vida percibida por el paciente y su familia”, apunta el enfermero.
Lizcano considera este galardón un estímulo y reconocimiento profesional y personal “a una labor que estamos realizando desde el grupo de trabajo de la Red de Enfermería en Cuidados Cardiovascular de Atención Primaria, perteneciente a la Sociedad Madrileña de Enfermería Familiar y Comunitaria desde hace nueve años”.
Además de ellos, los trabajos finalistas han sido: “Efectos del ejercicio en el manejo de la astenia relacionada con el cáncer, un ensayo clínico aleatorizado”, de Patricia Beorlegui y “Evaluación de la efectividad del tratamiento asertivo comunitario dirigido a personas usuarias del programa Primer llar en Barcelona”, de Inés Campo.