En el congreso se han presentado dispositivos “vestibles” desarrollados en España, como un colchón con sensores que detecta si la persona monitorizada está acostada, especialmente útil en atención domiciliaria; camisetas inteligentes para controlar la respiración o la temperatura; relojes que miden la glucosa o las pulsaciones; termómetros conectados al móvil para realizar mediciones a bebés en la frente y el oído y que permiten registrar los datos en una sencilla aplicación; o las conocidas Google Glass. Tecnologías todas ellas que “pueden revolucionar la asistencia sanitaria y favorecer una medicina mucho más personalizada y preventiva”, que no sólo permite controlar a los pacientes de forma puntual, sino permanente en el tiempo. Así lo afirma Carlos Mateos, coordinador del congreso.
Para los expositores que han participado en la muestra, uno de los futuros de los wearables, o de los dispositivos de innovación en salud es la teleasistencia, de tal forma que la tecnología permita ahorrar costes al sistema. “Todo lo que permita hacer un seguimiento personalizado al paciente y en su casa estamos ganando. Al final es buscar o aplicar herramientas tecnológicas, desde sensores a otras plataformas vía web de seguimiento, que permitan controlar al paciente lo más cómodo y accesible a todo el mundo”, afirma el responsable de CETEMMSA, empresa que está desarrollando una camiseta sensorizada inteligente que permite medir la respiración, la temperatura y la frecuencia cardíaca.
Big Data
También se ha hablado, y mucho, de las posibilidades del análisis de grandes cantidades de datos, el denominado Big Data, como los que proporcionan estos dispositivos, pero también los genes o las redes sociales, y que están permitiendo identificar los riesgos de enfermedades que podemos padecer en el futuro, encontrar nuevas moléculas terapéuticas, variaciones genéticas asociadas al cáncer, o el cálculo de posibles propagaciones epidémicas, como la gripe o el virus ébola. Para Carlos Mateos, el Big Data “nos ayuda a mejorar la asistencia sanitaria, a saber dónde emplear mejor los recursos, a que el profesional de la salud pueda tomar una decisión mucho más exacta, en el momento adecuado, a través de una tecnología como puede ser un teléfono móvil o una Tablet”.
Ventajas para los profesionales
La utilización de estos dispositivos tecnológicos tiene “una gran utilidad para los profesionales sanitarios”. Según José M.ª Cepeda, enfermero y responsable de la Secretaría de Innovación, Nuevas Tecnologías y Conocimiento de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES) en la atención domiciliaria, la utilización de dispositivos de monitorización facilita el trabajo de los profesionales, que pueden “comprobar si un paciente está siguiendo correctamente el tratamiento o cómo evoluciona” cuando éste sale de un centro sanitario. De esta forma “se evitan ingresos innecesarios o visitas al profesional”.
También permite mejoras en la formación. “Hablamos de dispositivos que nos permiten grabar en primer persona distintas técnicas que luego podemos utilizar para hacer formación, o de las numerosas aplicaciones que salen todos los días para la educación para la salud en la que la enfermería tiene tanto que aportar”, añade Cepeda.
Además, el papel de los profesionales en el propio desarrollo de los dispositivos “es clave, porque al final estamos hablando de dispositivos que usan los mismos profesionales o que van a usar los pacientes. En ese caso, tanto al profesional como al paciente, como usuario final, es necesario implicarles en el diseño desde el minuto uno, para que sean ellos los que decidan cómo va a ser ese producto, si queremos que sean útiles para su salud”, concluye este experto.
Tecnologías reales
En España, la unión del Big Data y los wearables ya son una realidad en algunos centros sanitarios. Así, por ejemplo en el congreso se han presentado los resultados del proyecto Prevengo, desarrollado en el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, en colaboración con Sanofi, para el tratamiento de la obesidad infantil. También se han presentado los resultados logados por el grupo de genómica computacional del Barcelona Supercomputing Center, en los que, con un nuevo método computacional, pueden detectar de manera más rápida, precisa y sencilla cambios genómicos responsables de la aplicación y progresión de tumores.