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Notas de Prensa |
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Los resultados definitivos de la encuesta que ha involucrado a más de 11.000 enfermeras de toda España refrenda la percepción general de que los profesionales sanitarios no han contado con los más elementales equipos de protección contra el virus, lo que podría explicar el altísimo volumen de sanitarios contagiados en nuestro país. Según los datos oficiales, un total de 31.788 profesionales sanitarios (15,57% del total de casos positivos) -datos a 21 de abril- han resultado infectados desde el inicio de la pandemia. Sin embargo, extrapolando las respuestas de la encuesta de la Organización Colegial de Enfermería, casi de 74.000 enfermeras/os han presentado síntomas compatibles con COVIDsin confirmar si han tenido o no la enfermedad por la ausencia de test de diagnóstico. Por otra parte, de los enfermeros encuestados a los que sí se les ha hecho la correspondiente prueba (sólo al 23%), prácticamente una tercera parte –un 30,2%- ha sido certificado como caso positivo. El 5% incluso ha tenido que trabajar con síntomas.
Para consulta la encuesta, pulse aquí.
El COVID-19 no da tregua a nadie, pero los pacientes crónicos son una de las poblaciones más vulnerables. Y el confinamiento no es un buen aliado para estas personas. Por ello, el Consejo General de Enfermería ha lanzado una infografía y un vídeo animado para que los pacientes cuiden su salud en casa. “En la situación de alerta sanitaria en la que nos encontramos es muy importante que los enfermos crónicos sigan con sus tratamientos y sus cuidados en el domicilio. Y deben estar tranquilos porque, si fuese necesario, recibirán una asistencia sanitaria de calidad”, resalta Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería.
Declaraciones del presidente del Consejo General de Enfermería de España ante la retirada por parte del Gobierno de una partida de mascarillas, supuestamente de tipo N95, que estaba ya repartida por centros sanitarios de toda España
El pasado martes, 14 abril, en la rueda de prensa que el Gobierno celebra diariamente para comentar la situación de la pandemia por COVID-19, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, anunció que el Gobierno iba a crear un grupo de expertos para planificar la desescalada del confinamiento en el que se encuentra en estos momentos España. Estos expertos establecerán los pasos que se deben ir dando y determinarán cómo se aplicará la proporcionalidad de los movimientos, tanto para ir a trabajar como para volver, progresivamente, a la normalidad. El ministro aclaró que los técnicos que integrarán este comité van a ser propuestos por las Comunidades Autónomas y coordinados por el Gobierno y su principal objetivo será “garantizar la salud pública de todos en ese proceso de desescalamiento".
El Ministerio de Sanidad ha emitido una nueva orden para modificar otra vez los plazos para las evaluaciones anuales y la evaluación final de todos los residentes sanitarios. Todo ello se enmarca dentro de las medidas para luchar contra los estragos del COVID-19 para lo que se reclutó a los enfermeros y médicos residentes para incorporarlos a la atención a pacientes con COVID-19 aunque no hubieran finalizado el periodo de residencia.
Tras más de un mes de confinamiento, los hábitos de consumo de los españoles están empezando a cambiar. Este tiempo tan prolongado en los hogares ha hecho que las ventas de bebidas alcohólicas y dulces se hayan incrementado. De acuerdo con los últimos datos publicados por el Ministerio de Agricultura, se ha observado un 62,6% de incremento de las ventas de vino, un 70,1% de la cerveza y un 79,3% en las bebidas espirituosas. Además, se ha revelado que desde que están confinados, los españoles comen y beben entre horas un 55% más que antes. Ante esta situación, la Organización Colegial de Enfermería -que engloba los 52 colegios provinciales de nuestro país- ha elaborado una serie de recomendaciones para que la población no caiga durante la cuarentena en hábitos tóxicos que a largo plazo pueden convertirse en problemas de salud o incluso adicciones.
Ante la recomendación del Ministerio de Sanidad de que la población general utilice mascarillas higiénicas o quirúrgicas en aquellos desplazamientos al centro de trabajo en los que no esté garantizada la distancia de seguridad y su distribución en el transporte público, el Consejo General de Enfermería y toda la Organización Colegial han elaborado un nuevo material informativo en el que se explica de manera didáctica cómo se deben utilizar estas mascarillas, haciendo especial hincapié en el momento de su colocación y retirada. Una vez más, esta información se presenta en dos formatos: infografía y video.
La Organización Colegial de Enfermería quiere denunciar públicamente la baja catadura moral y manifiesta insolidaridad de aquellos vecinos –afortunadamente, una minoría- que hostigan con carteles amenazantes a los profesionales sanitarios que luchan contra el COVID-19 para que abandonen su vivienda por miedo a ser contagiados. No cabe mayor desprecio para los miles de profesionales también empleados de supermercados o Fuerzas y Cuerpos de Seguridad- que se juegan su propia salud para cuidar, atender o proporcionar seguridad a todos los ciudadanos.
El primer avance de la macroencuesta “Impacto del COVID-19 en la profesión enfermera”, impulsada por la Organización Colegial de Enfermería de España, ya ha alcanzado una muestra de más de 7.500 participantes. Y el análisis preliminar de los resultados arroja datos extremadamente preocupantes
La confirmación del fallecimiento de un enfermero del Hospital Severo Ochoa de Leganés (Madrid) tras luchar durante días contra el COVID-19 en la UCI del centro sanitario vuelve a teñir de luto toda la enfermería española. La triste noticia supone un golpe durísimo para todas las compañeras y compañeros de Esteban, enfermero de quirófano cuyo nombre se suma a la lista de profesionales fallecidos por cumplir con su deber y hacer su trabajo en primera línea, luchando contra la amenaza epidemiológica más grave a la que nos hemos enfrentado.
El estado de alarma declarado por el Gobierno y que se extenderá, de momento, hasta el 26 de abril mantiene encerrada en casa a la mayoría de la población con el objetivo de luchar contra el coronavirus y evitar todavía más la expansión. Pero son también muchas las personas que tienen que continuar saliendo a la calle para trabajar y lograr curar, cuidar y proteger a los contagiados, así como hacer que el país siga funcionando y garantizar la cobertura de las necesidades de toda la población.
La pandemia de coronavirus afecta ya a 1,3 millones de personas de 180 países y más de 70.000 han perdido la vida. Una catástrofe que está poniendo a prueba los sistemas sanitarios de todo el mundo y que ha hecho evidente una realidad de la que venían advirtiendo el Consejo General de Enfermería (CGE), el Consejo Internacional de Enfermeras (CIE) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde hace tiempo: la escasez de enfermeras y las precarias condiciones en que desempeñan su trabajo.