Para los convocantes de la protesta “ha llegado el momento de pedir hechos y no sólo palabras. Las enfermeras y enfermeros tenemos un gran compromiso ante nuestra sociedad y siempre lo hemos dado todo, tal y como se ha demostrado en esta terrible crisis sanitaria y los ciudadanos en su conjunto lo han sabido reconocer. Pero los responsables políticos y autoridades sanitarias han ignorado sistemáticamente nuestros planteamientos y potencial profesional”.
Por ello, la manifestación se iniciará a partir de las 11 de la mañana en la plaza de Jacinto Benavente (cercana a la puerta del Sol) y transcurrirá posteriormente, pasando por el Congreso de los Diputados, hasta las inmediaciones del Ministerio de Sanidad.
Color blanco
Para que lo que prime en la protesta sea la profesión en su conjunto, y no las organizaciones convocantes, se ha elegido el color blanco como imagen, para lo que solicitan a los enfermeros que vistan batas o chaquetillas blancas, para mantener la unidad, “evitando personalismos y mensajes dispersos, que lo único que darán a entender ante las autoridades sanitarias y responsables políticos es desunión”.
Para el desarrollo de la manifestación, que esperan que sea histórica, van a facilitar el traslado hasta Madrid para quienes lo necesiten, para lo que pueden consultar con su colegio provincial de enfermería o en la delegación provincial de Satse.
Reivindicaciones
Como señalan en la misiva en las últimas décadas, “muchas han sido las cuestiones planteadas desde nuestra profesión para contribuir en la mejora de la atención sanitaria, ante un modelo asistencial caduco, ineficaz e ineficiente”. Planteamientos que “los responsables políticos y autoridades sanitarias han ignorado sistemáticamente”.
Así, de forma prioritaria solicitan una adecuada planificación “desde la racionalidad de las necesidades reales de los cuidados que necesita nuestra sociedad de hoy y de futuro, con perfiles competenciales y dotación de plantillas que permitan dar una respuesta y atención sanitaria de calidad y seguridad, en la que no tengamos que sufrir ningún tipo de agresión, ya sea física o verbal, favoreciendo entornos laborales seguros y en las mejores condiciones para favorecer la dignidad profesional que todas las enfermeras/os se merecen”.
Asimismo, destacan “la grave discriminación que sufrimos al no permitir que estemos considerados al mismo nivel en el Grupo A de la administración, sin subgrupos, limitando e impidiendo nuestro desarrollo y avance profesional, a pesar de que no existen diferencias en cuanto a nuestro nivel académico respecto de otras disciplinas”.
También piden “una apuesta decidida por aportar soluciones a los retos en el ámbito de la investigación y una adecuada formación de nuestros estudiantes”.
Para todo ello quieren aunar las voces de todas las enfermeras y enfermeros y de los ciudadanos “en defensa de nuestra profesión y de la salud y seguridad de las personas”.