Enfermeros y enfermeras que han sabido estar durante todo este año al pie del cañón, a pesar de haber sufrido una de las peores crisis sanitarias, la llegada del ébola al país. Aunque no contaban con la suficiente formación para luchar contra el virus, los profesionales no han dudado en presentarse voluntarios para atender a los afectados y se han enfrentado a un problema que afecta a miles de personas a nivel mundial.
Desde el Consejo General de Enfermería queremos agradecer y dar el reconocimiento que se merecen a todos los profesionales que pasarán estas fiestas dentro de un hospital y también al resto de enfermeros que han estado luchando durante todo el año por mejorar la salud de los pacientes.
Redacción