La región de Sédhiou se caracteriza por su pobreza e inaccesibilidad geográfica, sobre todo en la estación de lluvias. También sus indicadores de salud están entre los más bajos del país. La mayor parte de su población es rural, con bajos niveles educativos. Desnutrición, paludismo, TBC y diarreas se dan con frecuencia, sobre todo en menores. Datos alarmantes como que el 22% de los menores de 5 años padecen desnutrición; el 18,5% de los recién nacidos son de bajo peso y el 90% de las madres padecen anemia. La mortalidad materna está estimada en más de 500 muertes por 100.000 nacidos vivos (en España se estiman 4 muertes por cada 100.000 nacidos vivos), además en Senegal el 32% de muertes de mujeres de entre 15 y 49 años están ligadas al embarazo y al parto. Por su parte, la mortalidad infantil es de 35 por mil nacidos vivos para la mortalidad neonatal y 26 por mil nacidos vivos para la postnatal.
Ello supone que el riesgo de muerte antes de los 5 años es de 121 por mil. Asimismo, perduran ciertas prácticas tradicionales y socioculturales, como la mutilación genital femenina, u otras creencias en torno al embarazo y al parto, que hacen particularmente precaria la salud de la mujer y los recién nacidos.
Por otra parte, la falta de recursos económicos impide a las familias poder costearse las hospitalizaciones, los medicamentos básicos e incluso los partos asistidos.
El proyecto se ha llevado en plena coordinación con el Ministerio de Salud de Senegal y su estrategia de salud para la región, que son quienes garantizarán que tenga continuidad y un impacto real y sostenible. Así, la unidad de pediatría que EPM ha equipado estará dirigida por Ismaël Touré, un especialista pediatra contratado por el ministerio, lo que asegura que se aprovechará al máximo el material entregado.
El equipamiento ha sido entregado a través de un acto que ha tenido lugar en el mismo hospital regional de Sédhiou, al que asistieron el gobernador de la Región de Sédhiou, el alcalde de la localidad, el director del hospital regional, autoridades del Ministerio de Salud y representantes de Enfermeras Para el Mundo, tanto locales como de la sede central de Madrid. Las autoridades de Sédhiou mostraron su agradecimiento a EPM y su continuo esfuerzo en la región.