Con este panorama, es evidente que la conciliación de la vida familiar y laboral es, para ellas, incluso más complicada. Estamos a las puertas de la celebración del Día de la Madre, y pese a las connotaciones consumistas que puede tener esta efeméride –aunque bien es cierto que el día de la Madre debería ser todos los días– resulta interesante saber cómo se organizan distintas compañeras en su vida diaria para compaginar todos los aspectos de su vida, que es lo que tratamos en nuestro artículo de portada del último número de ENFERMERÍA FACULTATIVA.
Al margen del hecho anecdótico, todo lo relacionado con la conciliación está muy en boga últimamente, incluyendo peticiones para la racionalización de los horarios, como la que ha realizado la ministra de Sanidad, Ana Mato, sobre el prime time televisivo. Resulta evidente que se trata de algo en lo que toda la sociedad, empezando por las administraciones públicas, debe trabajar más y mejor, en todos los ámbitos, para que la conciliación sea posible.
Nuestros hijos son el futuro, y si, madres y padres, no estamos con ellos para cuidarlos, criarlos y educarlos los valores que adquieran puede que no sean los que queremos que tengan, o los que realmente necesitarán para vivir y desarrollarse en sociedad. Quizá ya es hora de enseñarles que podemos comprometernos con ellos, y ni sólo con el trabajo, apostando por una verdadera conciliación de la vida laboral y personal. ¡El futuro de todos está en juego!
Editorial de Máximo González Jurado, presidente del Consejo General de Enfermería, con motivo del Día de la Madre.