Tal y como declara la enfermera, “desde tiempos inmemoriales, las personas a menudo han descubierto en el proceso creativo y en el arte una forma de amortiguar el dolor ante una pérdida, como una ayuda útil para superar el duelo. Profundizar en el impacto de cualquiera de las disciplinas artísticas en el proceso de duelo es valioso para ahondar en la naturaleza del ser humano y su relación con los procesos aflictivos”.
La enfermera de la Unidad de Atención Primaria Elorrio-Abadiño-Berriz destaca que “en el proceso de duelo se concentran muchas y muy diversas e intensas emociones, y a lo largo de la historia, el arte —en sus diversas disciplinas en general, y la pictórica en particular—, no ha sido ajena a ellas, siendo el retrato, entre otros, un recurso visual extensamente utilizado durante siglos”.
El trabajo premiado por el Colegio de Enfermería de Vizcaya parte del estudio de un caso clínico de Enfermería en torno al duelo mediante el proceso creativo. “Este caso clínico fue lo que me llevó a realizar una monografía con base en obras de arte para mostrar la envergadura de las emociones en la práctica enfermera en particular y en la vida en general”.
En la monografía se recoge no solo una selección de obras de históricas y contemporáneas de diversas técnicas, como óleo sobre lienzo, pintura al fresco y grabado, “sino también pinceladas de la neurociencia, del cosmos emocional y, según estudios recientes, de una potencialmente futura ‘reconsolidación de la memoria’ con el fin de combatir y neutralizar traumas”.
Entre las obras recogidas en la monografía se pueden señalar ‘Donna allo spechio’, de Nicola Pucci; ‘La batalla de Anghiari’, de Leonardo da Vinci; ‘El sueño de la razón produce monstruos’, de Francisco de Goya; ‘Melancolía’, de Edvard Munch; y ‘En el tocador. Autorretrato (1909)’, de Zinaída Serebriakova.
“No hay que olvidar que sanar los daños emocionales no comporta olvidar; la superación del duelo manifiesta fundamentalmente que esta situación, aun siendo algo natural tras una pérdida, deja de dominar nuestras vidas”, concluye la enfermera.
Ianire Elgezabal Intxaurraga obtuvo también el tercer premio de la XII convocatoria de los Premios Vicenta López Echevarría a trabajos de Enfermería, con el trabajo titulado ‘Efemérides de dos enfermeras excepcionales: Florence Nightingale e Irena Sendler’, y el primer premio de la XI convocatoria, gracias al texto ‘Caso clínico. Plan de cuidados de enfermería. Plan de cuidados paliativos y al final… la vida’.