Algunos intentos anteriores para arrojar luz en un capítulo tan complejo como el de los recursos humanos no habían dado siempre el fruto esperado. Las iniciativas que partían de un colectivo profesional de forma aislada, médicos o enfermeros, o del Ministerio sin contar con los profesionales sólo tenían, por así decirlo, una cara del dado de las profesiones sanitarias. Sin embargo, el nuevo Libro Blanco alumbra una situación muy diferente. “Éste es un estudio científico que nace con la implicación absoluta de las instituciones y las profesiones sanitarias, con un grado de consenso altísimo y con mucho diálogo para llegar a esos acuerdos. Sin duda, supone un paso importante para la consolidación de las profesiones en el Sistema Sanitario”, asegura Máximo González Jurado, presidente del Consejo General de Enfermería.
A ciegas
“No se puede estar gobernando y planificando el futuro –añade González Jurado- cuando se desconoce qué va a ser de las profesiones que intervienen de forma destacadísima en todo el sistema”.
Con la información y las proyecciones del Libro Blanco, elaborado por la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid y una subcomisión del Consejo Asesor de Sanidad, ahora se impone actuar siguiendo la línea marcada, ya que sus recomendaciones y observaciones afectan a todos, Ministerio, Comunidades Autónomas, sindicatos, colegios profesionales, universidades… “Ahora lo que toca es que se tome en consideración por parte de todos ellos”, afirma el presidente de los enfermeros españoles, quien asegura que “hemos entrado bastante en detalles de la profesión enfermera. Es un trabajo riguroso, realizado desde la libertad y la participación de todos los protagonistas y se ha logrado un gran consenso. Ése es el valor que aporta”.
David Ruipérez