Los representantes de la enfermería han abordado con el consejero cómo la Sanidad asturiana está abocada a una huelga competencial, que ha provocado el propio Ejecutivo Central con su decreto, ya que desde el momento en que éste se publique en el BOE, centenares de actuaciones cotidianas pasarán a ser ilegales.
Estas actuaciones ya no serán posibles porque con el texto aprobado se establece que, en toda situación en la que el enfermero necesite utilizar una serie de medicamentos sujetos a prescripción médica, el paciente tendrá que ser diagnosticado previamente por el médico, quien deberá establecer el tratamiento, asignar el protocolo que corresponda y realizar el seguimiento del paciente. Todo ello abocará a la sanidad a un colapso y un caos sin precedentes, según la Mesa, ya que hasta ahora en muchas situaciones lo vienen haciendo los enfermeros con total normalidad, lo que supone agilidad para el sistema sanitario y menos trastorno para los pacientes.
Trabajo complementario e independiente que debe ser reconocido
Del Busto defiende que el Gobierno de Mariano Rajoy consensúe el Real Decreto del 23 de octubre que regula la prescripción por parte de los profesionales de la enfermería porque, a su juicio, no solo no resuelve las dudas sobre la prescripción de determinados productos, sino que complica la situación al negar una realidad que ocurre de hecho y que no genera problemas en el entorno sanitario.
“El documento aprobado por el Gobierno de reconoce que la enfermería tiene un trabajo específico y relevante al lado del paciente, que es complementario e independiente del que ejerce el médico y que debe ser reconocido en el real decreto”, ha explicado al término de la reunión.
El titular de Sanidad, que mantendrá en los próximos días un encuentro con representantes de la Organización Médica Colegial de España, ha asegurado que “lo que es evidente es que esta regulación del Ministerio no deja contento a casi nadie, no reconoce el importante papel que desempeña la enfermería en el sistema sanitario y resulta insatisfactorio para ambas profesiones, la de medicina y la de enfermería".
La valoración del encuentro que hace el presidente del Sindicato de Enfermería SATSE, Víctor Aznar, es muy positiva. “Hemos tenido la oportunidad de hablar con todos los consejeros y partidos políticos para transmitir la barbaridad que ha hecho el Gobierno de la nación y el ministro en su nombre. Nos hemos reunido hoy con el consejero asturiano y hemos encontrado una postura de diálogo, de acercamiento y de comprensión”, ha dicho.
Una barbaridad
“Todos coincidimos -ha apuntado- en que tenemos que retomar el dialogo y en que no debe salir publicado el decreto y tiene que volver al seno del consenso dentro del Consejo Interterritorial. Tiene que ser un decreto que salga no a espalda de las profesiones ni a espaldas del sistema sanitario, sino que sea acorde con la realidad y con la legalidad que tienen los enfermeros día a día”.
Por su parte, Máximo González Jurado, presidente del Consejo General de Enfermería, ha asegurado que “el consejero entiende que, efectivamente, este decreto en las circunstancias en las que está redactado va a generar un problema al sistema de salud, a los ciudadanos y a los profesionales y que hay que tratar de evitarlo por todos los medios. Nosotros hemos expresado nuestra mejor disponibilidad para buscar una vía de encuentro, de acuerdo para que efectivamente se dé respuesta a lo que la ley previó cuando se aprobó en el Congreso de los Diputados, pero que al mismo tiempo sea viable, sea factible, sea posible y sea consensuado por todas las partes, las profesiones, las comunidades autónomas, el Ministerio de Sanidad y se vaya hacia la normalidad que exige el sistema sanitario pero con la seguridad jurídica que todos los profesionales deben tener. Salimos gratamente satisfechos de esta reunión por encontrar receptividad, por conocer perfectamente el tema y ofrecerse a ayudar a la solución de este problema y de esta situación”.