“Quiero dirigirme a vosotras y a vosotros, haceros partícipes de varios sentimientos que, seguramente, compartimos todos en estos tiempos tan difíciles que vivimos todos; son tres: orgullo, gratitud y reivindicación. Como no estar orgullosos después de meses y meses de tanto trabajo desde distintos frentes. A veces, lo sabemos todos, al límite de las fuerzas, otras veces superados por la rabia y la frustración, pero, desde luego, siempre, con la máxima profesionalidad”, ha destacado.
Asimismo, ha puntualizado que “las 316.000 enfermeras y enfermeros sabemos que ni los contratiempos, ni la falta de medios ni la saturación, ni la muerte de tantas personas minarán nunca nuestras ganas de ofrecer los mejores cuidados a quién los necesita, con pandemia o sin pandemia. Cada día y durante las 24 horas del día y los 365 días del año”.
El presidente de las enfermeras españolas ha querido mostrar “su inmensa gratitud, gratitud con mayúsculas, por ese esfuerzo en todos los frentes, en hospitales, en primaria, en los colegios, en las empresas, en los servicios de emergencias”.
En su mensaje, Pérez Raya ha apuntado que “las ratios de enfermeras en nuestro país nos sitúen a la cola de Europa, ni que os forméis como enfermeras especialistas para luego no poder ejercer en el ámbito en el que os habéis especializado o que al final tengáis que ofrecer vuestro talento y trabajo en otros países”.
“También ha llegado el momento de reivindicar lo que no merecéis las enfermeras: no merecéis que los gobernantes ignoren las especialidades y la prescripción, no merecéis vivir instaladas en la precariedad y la inestabilidad laboral, no merecéis que os pongan techos de cristal para acceder a algunos puestos directivos y desde luego, no merecéis que se os relegue a un nivel profesional que no os corresponde cuando todas y todos deberíais ser A1”, ha concluido.