La mayor alabanza se la han llevado los 300 voluntarios estudiantes de enfermería. Al pie del cañón, día a día, estos futuros enfermeros han sabido cómo resolver como auténticos profesionales las diferentes tareas que se les han asignado. Los jóvenes estudiantes han sido durante estos días los mejores guías del congreso, los mejores puntos de información y los mejores ayudantes de comunicación. Enfrentándose a tareas completamente nuevas para ellos han demostrado que el futuro de la enfermería promete, que la profesión crece con grandes profesionales que son capaces de enfrentares a cualquier reto. También ha habido palabras positivas para la organización, capaz de estructurar un programa científico de primer nivel y resolver las dudas que han podido surgir a los enfermeros que recorrían los pasillos.
Desde India, Argentina, España, Líbano, Ghana, China, México y muchos países más dan las gracias por este gran evento internacional, que ha sido considerado cómo “uno de los mejores congresos del CIE”, un evento que para todos los asistentes siempre quedará en sus memorias. Ahora sólo queda recordar con muy buen sabor de boca y empezar a planificar la siguiente cita mundial de la enfermería: Singapur.
Marina Vieira